VÍDEO
Cómo empezar un videoblog y convertirse en profesional de esta práctica
El videoblog es mucho más que abrir un canal de YouTube. Consiste también en crear contenido de vídeo que conecta con las personas a nivel personal.
¿Qué es el videoblog?
La creación de videoblogs (o “vlogging”) puede girar en torno a casi cualquier cosa. Los videoblogs pueden ser de carácter crítico, cómico o educativo. Sin embargo, todos los videoblogs y videoblogueros tienen algo en común: muestran la personalidad de los creadores. Los videoblogueros son más que meros creadores de contenido. Sus canales son personales y sus vídeos tratan tanto de ellos como de cualquier otra cosa. Los videoblogueros se muestran a sí mismos ante el mundo (o una versión de ellos mismos). Se colocan frente a la cámara y se vuelven vulnerables.
Montar un videoblog
Los videoblogueros, al igual que los blogueros que les preceden, hablan sobre ellos mismos, pero suele ayudar enfocarse en un tema para el canal de YouTube que atraiga a cierta audiencia. “Asegúrate de tener un nicho o comunidad en la que de verdad quieras enfocarte”, señala el videobloguero James Kim, “y expandirte a partir de ahí”. Kim, asistente médico, se dio cuenta de que no existía ningún canal de YouTube dedicado a los problemas a los que se enfrentan a diario él y sus homólogos. Se puso en marcha para llenar ese vacío y su videoblog tiene éxito porque en él explica cómo es vivir y trabajar como asistente médico. Al hacerlo, encontró su público en una gran comunidad de personas que comparten su profesión.

Equipo de videoblog
La mayoría de los youtuberos profesionales utilizan una cámara digital, pero los principiantes no necesitan la mejor videocámara Canon o Sony con estabilización de imagen. Puedes empezar con tu teléfono. Los móviles como iPhone y Android pueden grabar vídeos de una calidad lo suficientemente buena para YouTube y, aunque no tengan micrófonos externos, son capaces de recoger sonido de buena calidad. “Yo considero que un iPhone es una cámara digital”, señala Kim.
Un software de edición profesional de películas como Adobe Premiere Pro te permite editar cualquier videoblog con las mismas herramientas que usan quienes montan películas, perfectas para la edición en un ordenador. Otro software de edición está especialmente diseñado para quienes usan dispositivos móviles, de modo que puedes editar videoblogs en tu teléfono.
Sin embargo, mientras progresas, es totalmente legítimo actualizar tu equipo. Si quieres grabar fuera o sobre la marcha, las cámaras de acción como las GoPro pueden ser muy útiles. Kim no recomienda ninguna videocámara ni cámara digital en especial, pero sí que sugiere usar una con una pantalla pequeña que se gire hacia arriba para que puedas verte. Poder monitorizar tus movimientos mientras grabas puede ayudarte a actuar y dirigirte mejor.

Videoblog, flujo de trabajo y equilibrio entre vida personal y laboral
El de los videoblogs puede ser un trabajo gratificante, pero hay cosas con las que se debe tener cuidado.
Como creador de contenido autónomo, te planificas tú mismo. No puedes llegar tarde al trabajo ni tu superior te obliga a quedarte hasta tarde, pero también significa que no tienes hora definida a la que dejar de trabajar. No hay un fin de jornada bien definida, ni días normales de descanso, ni vacaciones pagadas ni tiempo libre remunerado. El único tiempo libre del trabajo es el que tienes para ti mismo, y es muy fácil empezar a trabajar muchas horas o a horas intempestivas.
Busca el equilibrio estableciendo un horario, poniéndote tus propios plazos y estableciendo el tiempo en el que no vas a trabajar. “Muchos creadores hablan sobre el síndrome de desgaste profesional”, sostiene Amanda. “Creo que puede resultar útil tener un horario agradable y coherente”.

Regulariza el momento de la semana o del día en que se va a escribir un guion, grabar un vídeo, editarlo y promocionarte. De este modo, podrás estar al tanto de las cosas y tu público agradecerá que tus vídeos se publiquen a la misma hora cada semana o cada mes. Con un horario de trabajo y publicación regular, puedes mantener un flujo de trabajo uniforme y conseguir un equilibrio. “Una cosa que me funciona es que mi partner tiene un horario de 9 a 17 horas”, señala Amanda. “Intento terminar mi jornada para cuando él llega a casa y los fines de semana me los tomo libres. Así, creo cierta barrera entre el trabajo y mi vida personal. De lo contrario, estaría en mi oficina el día entero”.
Quienes hacen videoblogs también deciden cuánto quieren enseñar o no de su vida real. Kim, por ejemplo, no utiliza el nombre de su lugar de empleo en sus vídeos y Amanda no muestra el vecindario donde vive. “Establecer unos límites online estrictos es algo que he aprendido”, afirma Amanda. Los troles, los comentarios negativos, los acosadores y el doxeo son temas muy preocupantes. Debes decidir con antelación si quieres o no usar tu nombre real, tu nombre completo y cuánto de tu vida real quieres mostrar en YouTube.
Triunfa en la creación de videoblogs
Es muy fácil convertirse en creador ante la cámara, pero no esperes hacerte viral de inmediato. A menos que ya seas una celebridad, no vas a conseguir millones de visualizaciones en tu primer vídeo, ni siquiera en tu primera docena de vídeos. El videoblog trata sobre crear un gran cuerpo de trabajo que entusiasme a tu audiencia y que haga desearle volver por más. “En YouTube vemos a mucha gente que parece haber triunfado de la noche a la mañana pero, en realidad, llevan currándoselo tres, cuatro o cinco años”, señala Kim. “Y, luego, está el vídeo que les lleva al límite”.
