Cómo escribir un guion.

Desde Hollywood hasta Bollywood, las películas empiezan por guiones. El origen de la magia del cine reside en el duro trabajo de elaborar guiones de películas.

Una persona mirando una pantalla de previsualización de un vídeo en un plató de producción mientras revisa un guion

¿Qué es un guion?

Hacer una película puede llevar años. Y, al igual que sucede con cualquier otro proyecto de gran envergadura, debe empezar por una idea. Si una película es como un edificio, el guionista es el arquitecto. “El guion de una película es la estructura del edificio —afirma el guionista Steven Bernstein—. Es el plano técnico. Tu plano. Todas las películas, desde los taquillazos hasta los cortometrajes realizados en escuelas de cine, empiezan con un guion, y es el documento más importante que producirás en todo el proceso de realización de la película”.

La escritura de guiones es un proceso industrial en la misma medida que un arte o una profesión. Los guionistas profesionales deben cumplir las convenciones de formato y las normativas del sector. Todo miembro de una empresa de producción debe ser capaz de tomar un guion y saber al instante dónde encontrar datos básicos tales como la página del título, el nombre del guionista y el número de afiliación al Writers Guild of America (abreviado WGA, el sindicato de guionistas de Estados Unidos). Además, deben ser capaces de localizar la sinopsis de la historia, el protagonista y el género.

Estos son los elementos básicos de los guiones, según profesionales de Hollywood.

La estructura de los tres actos.

La mayoría de los guiones de películas, al menos en el mundo anglófono, siguen una estructura de tres actos.

La acción de una página del guion debe corresponderse con la acción de un minuto de la película. “En el formato del guion, cada página dura aproximadamente un minuto —afirma la directora de cine Whitney Ingram—. Noventa minutos equivalen a 90 páginas”. De vez en cuando hay excepciones. Las películas con mucho diálogo y personajes que hablan rápido pueden tener diálogos de más de una página por minuto, pero en general, hay una correspondencia entre el número de páginas y de minutos.

Primer acto

El primer acto presenta los personajes y el conflicto central de la historia. Además, es en este acto en el que los cineastas deben llamar la atención del espectador y hacer que les interese la película.

“Para empezar cualquier película, tienes que desempeñar dos funciones importantes —indica Bernstein—. Es decir, enganchar al público y hacer que se interese por los personajes”. El primer acto suele incluir un incidente desencadenante, en el que el protagonista se enfrenta a un obstáculo o a un desafío que tiene que superar, y se pasará el resto de la película lidiando con él.

Segundo acto

Durante el segundo acto, los personajes se enredan en los problemas, los desafíos y los conflictos que ocupan la mayor parte de la película. Los problemas son continuos, pero quedan sin resolver, y todo está en el aire. “El punto intermedio se halla justo a mitad del relato, en el momento en el que se han acumulado todos los problemas”, explica Bernstein.

El segundo acto suele ser el momento en el que los personajes se encuentran en su momento más bajo, en el que los malos suelen llevarse unas cuantas victorias y las circunstancias pueden antojarse desesperadas o irresolubles. A lo largo del primer y el segundo acto, un buen guionista incluye momentos y elementos que se saldan en el tercero.

Tercer acto

En el tercer acto se observa cómo los personajes cambian, se ponen a la altura del desafío o sucumben a las fuerzas que les han caído encima. El tercer acto es el momento en el que los personajes se enfrentan al desafío central de la película. Aquí es cuando los héroes asaltan el castillo, los detectives resuelven los casos y los protagonistas de las películas románticas dan discursos apasionados en los que confiesan su amor. También es cuando germinan otras semillitas que has ido plantando a lo largo de todo el guion.

“La clave de un buen guion consiste en preparar todas esas pepitas o joyas que se saldan en el tercer acto”, afirma Bernstein.

Más allá de la estructura de los tres actos

La estructura de los tres actos es una directriz y una convención, no una regla. Muchos cineastas van más lejos y cuentan historias que carecen de un primer, un segundo o un tercer acto claros, o incluso de personajes o un conflicto claros. “Yo diría que la función del arte consiste en darles a los espectadores unas gafas nuevas con las que ver el mundo —comenta Bernstein—. Debes disponer de libertad de pensamiento no solo para encarar el contenido, sino también el aspecto formal”. Puedes escribir un guion que rompa con lo convencional, pero si lo haces, hazlo a propósito.

Personas sentadas una al lado de la otra con guiones en las manos how-to-write-a-screenplay
Una persona de pie con una Steadicam junto a otra que utiliza un walkie-talkie y sujeta un guion

Términos de la escritura de guiones.

Como sucede en toda profesión, la escritura de guiones tiene su propia colección especializada de terminología, argot, jerga profesional y lenguaje. Estos son una serie de términos que podrían resultarte útiles:

Encabezados de escena

Todas las escenas de un guion parten de un encabezado de escena, que es una breve descripción del lugar en el que se desarrolla la escena. Los encabezados de escena siempre indican si una escena transcurre en interiores o en exteriores, la ubicación exacta y la hora del día. Por ejemplo, una escena que tenga lugar en Tatooine comenzaría por un encabezado de escena como el siguiente:

EXT. TATOOINE – DÍA

Un encabezado de escena en el interior de la Estrella de la Muerte sería así:

INT. ESTRELLA DE LA MUERTE – NOCHE

Y así sucesivamente.

Descripciones

Los encabezados de escena son sencillas y enunciativas, y en cuanto te las quitas de encima, puedes empezar a caracterizar el entorno con las descripciones, de las cuales la siguiente pudiera ser un ejemplo:

“Aparición gradual de un planeta desértico y desolado. Vemos a R2-D2 y a C3PO andando por unas dunas que parece que no tienen fin”.

Las descripciones les dan a los lectores una idea de lo que debiera suceder en la escena, así como lo que están haciendo los personajes cuando los vemos.

Diálogo

El diálogo suele ocupar la mayor parte del guion de una película. El diálogo presenta el nombre del personaje encima de cada parlamento y se suele escribir sin comillas. Además, se escribe con amplios márgenes o centrado para diferenciarlo en la página de las descripciones y del resto del texto. Por ejemplo, el parlamento de Han Solo fanfarroneando sobre la velocidad de su nave sería así:

HAN

¿No habéis oído hablar del Halcón Milenario? ¡Es la nave que hizo la carrera Kessel en menos de doce parasegundos!

A veces, el diálogo contiene instrucciones especiales o notas entre paréntesis, como si un personaje está fuera de plano o hablando en off. Cuando Obi-Wan le dice a Luke que desactive la computadora podría quedar así:

KENOBI (OFF)

Utiliza la Fuerza, Luke.

Pulso dramático

A los acontecimientos o momentos importantes de un guion se los denomina “pulsos dramáticos”. “Un pulso dramático de un relato es un momento significativo —aclara Bernstein—. Es cuando el curso de los acontecimientos pueden dar un giro en otra dirección”. Ejemplos de pulsos dramáticos son cuando un detective encuentra una pista importante, cuando hieren a un héroe de acción, o cuando los protagonistas de una comedia romántica tienen un conflicto o un malentendido que los separa.

Loglines

“El logline es el resumen de la historia en una sola frase”, explica Bernstein. El logline suele ser lo primero que oyen sobre una película los responsables de un estudio. Para escribir un guion, los guionistas suelen partir de un logline y, a partir de ahí, lo van desarrollando. No obstante, siempre se puede cambiar el logline después de haber redactado el borrador final.

Los loglines suelen contener un gancho. “Normalmente, el logline presenta una cierta carga irónica —comenta Ingram—. Dicha ironía suele mostrar qué es lo que diferencia a la película o la hace inusual. “No me sé de ninguna película que convenciera con un logline —afirma Bernstein—, salvo quizá Serpientes en el avión”.

Discursos de ascensor

Los discursos de ascensor son un poco más largos que los loglines, pero siguen siendo breves. Un discurso de ascensor es una breve descripción o sinopsis de un proyecto que suele durar unos 30 segundos, lo que se tarda en subir o bajar en ascensor. El discurso de ascensor de Hamlet sería algo parecido a lo siguiente:

“El rey muere y su hermano asciende al trono. El hijo del rey muerto sospecha que su padre fue asesinado, y pugna por derrocar a su tío”.

Está claro que así se dejan muchas cosas fuera, pero lo que interesa es explicar la película rápidamente.

Tratamientos

Un tratamiento es un documento escrito que resume la historia y las ideas principales de una película. Suele estar redactado en presente y se ciñe a los principales pulsos dramáticos y grandes momentos de la película. Los tratamientos suelen ser mucho más cortos que los guiones, pero a veces pueden llegar a tener unas 60 páginas.

Guiones de rodaje

Cuando una película está en fase de producción, se crea un guion de rodaje. Esta versión del guion numera las escenas para ayudar a todos los departamentos a coordinar su trabajo, lo cual resulta especialmente útil, ya que la mayoría de las películas se ruedan desordenadas (es decir, sin seguir el orden cronológico de los acontecimientos del guion).

Por ejemplo, si una película tiene varias escenas independientes que tienen lugar en un casino, el guion de rodaje emplea números para indicar que todas esas escenas se pueden rodar en el mismo segmento temporal, aunque tengan lugar en momentos distintos de la película.

En los guiones de rodaje se utilizan páginas de colores para ayudar a que los equipos tengan la certeza de estar trabajando con la versión más reciente. Toda modificación se añade a los guiones de rodaje con un color nuevo.

Una persona grabando en vídeo a un actor que lleva puesto un traje espacial en una producción

La magia del cine sobre el papel.

La producción cinematográfica es un proceso largo que puede durar años, y suele conllevar la participación de cientos si no miles de profesionales especializados. Ahora bien, todo taquillazo surge de una idea para una película concebida por un guionista. Un guion cinematográfico es una guía para proyectos colectivos, como también sucede con el plano de un edificio (o el mapa del tesoro en un viaje de exploración).

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